Con esta carta querría realizar una serie de aclaraciones en relación a las críticas que el alcalde de Orio hacía a la formación Ezker Batua-Berdeak y Aralar en esa localidad en una carta publicada el pasado 17 de noviembre, en la que literalmente decía que es "lamentable" que a cinco meses de la celebración de las elecciones, los integrantes de la lista renuncien a su puesto de concejal y "traigan a uno de fuera" para sustituirlo.
En primer lugar, señalar que la candidatura que presentó Ezker Batua-Berdeak y Aralar en Orio en las últimas elecciones municipales fue impulsada por los y las oriotarras preocupadas de la forma de actuar del Gobierno Municipal en la anterior legislatura.
Las dificultades para confeccionar las listas para las elecciones municipales han sido un problema para todos los partidos políticos. Por ejemplo, en la anterior legislatura, el presidente del GBB, Joseba Egibar, fue alcalde de Lizartza porque ningún afiliado local estaba dispuesto a asumir la responsabilidad, y en la presente legislatura este municipio guipuzcoano está gobernado por el Partido Popular.
Ezker Batua-Berdeak encabezó la lista de Orio en los dos primeros puestos y, a nuestro pesar, los dos concejales que logramos han cesado en sus cargos, el primero por razones personales y el segundo por cuestiones laborales. Situaciones similares se producen en muchas localidades y afectan a todos los partidos políticos. Es una cuestión que hay que aceptar con naturalidad.
Además, se contradice el alcalde de Orio, Jon Redondo, quien, en la primera parte de su carta señala que busca la participación de todos los partidos con representación en el Ayuntamiento, para a continuación criticar a Ezker Batua-Berdeak por la recomposición de la lista, además con palabras en absoluto adecuadas y con connotaciones xenófobas. En este mundo de la globalización, algunos pedimos el derecho de voto de los inmigrantes y que éstos puedan decidir la orientación política de un Ayuntamiento, y a usted, señor Redondo, no le agrada en absoluto que una persona de una localidad próxima pueda ser la correa de transmisión al Consistorio de un sector de la población de Orio. La persona que sustituirá al concejal de EB Oier Sarobe ha sido propuesta por los y las vecinas de Orio que impulsaron la candidatura Ezker Batua-Berdeak y Aralar con la determinación de trabajar juntos y transmitir sus preocupaciones al Consistorio, denunciar las tropelías urbanísticas cometidas y poner freno a las aberraciones futuras.
Jon Redondo lo que debería hacer es dejar la demagogia, cuando dice que las personas que han tenido que cesar en la lista -que es muy distinto a dimitir-, no querían trabajar para Orio, o que los oriotarras no se merecen esta situación.
Termina su carta diciendo "que los oriotarras no se merecen esto". La ciudadanía que me ha propuesto para la concejalía no lo ve así. Estas personas que se merecen todo el respeto, si de algo están convencidos es de que no son merecedores de las tropelías urbanísticas que se han cometido: construir en primera fila de la playa, perdiendo para siempre un espacio privilegiado de los oriotarras; destruir zonas marismeñas, no respetar los márgenes de costas y ríos, carecer de un estudio riguroso hidrológico de las avenidas de aguas de 10-50 y 100 años que garanticen la no inundabilidad de zonas de Orio, ignorar 1.500 firmas en contra de un plan urbanístico. De estas y de más cosas no son merecedores los oriotarras.
Como conclusión, decir que su carta no aporta nada y sí oculta mucho. Si quiere de verdad participación ciudadana, abra las puertas del Ayuntamiento sin limitaciones para que los concejales puedan recibir y atender a la ciudadanía, sus quejas y sus aportaciones. Ponga los medios para que los presupuestos de 2008 sean participativos, para que los oriotarras puedan decidir a dónde y a qué se destinan sus impuestos. Póngase las pilas para los cambios que se aproximan y cambiarán Orio: la conexión con la autopista, más aparcamientos, calles más acogedoras, más y mejor pequeño comercio, más y mejor servicio hostelero, que el dinero que genera el pequeño comercio circule en Orio y no se evada, que no se destruyan muchos puestos de trabajo de calidad a cambio de pocos mal remunerados, precarios y de baja calidad y diga no a Eroski. Este debe ser su reto y nuestra responsabilidad es ayudarle a llevarlo a cabo.
Iñaki García Arambarri
Concejal de Ezker Batua-Berdeak de Orio
publicado en Noticias de Gipuzkoa. Cartas al director. 24/11/07
En primer lugar, señalar que la candidatura que presentó Ezker Batua-Berdeak y Aralar en Orio en las últimas elecciones municipales fue impulsada por los y las oriotarras preocupadas de la forma de actuar del Gobierno Municipal en la anterior legislatura.
Las dificultades para confeccionar las listas para las elecciones municipales han sido un problema para todos los partidos políticos. Por ejemplo, en la anterior legislatura, el presidente del GBB, Joseba Egibar, fue alcalde de Lizartza porque ningún afiliado local estaba dispuesto a asumir la responsabilidad, y en la presente legislatura este municipio guipuzcoano está gobernado por el Partido Popular.
Ezker Batua-Berdeak encabezó la lista de Orio en los dos primeros puestos y, a nuestro pesar, los dos concejales que logramos han cesado en sus cargos, el primero por razones personales y el segundo por cuestiones laborales. Situaciones similares se producen en muchas localidades y afectan a todos los partidos políticos. Es una cuestión que hay que aceptar con naturalidad.
Además, se contradice el alcalde de Orio, Jon Redondo, quien, en la primera parte de su carta señala que busca la participación de todos los partidos con representación en el Ayuntamiento, para a continuación criticar a Ezker Batua-Berdeak por la recomposición de la lista, además con palabras en absoluto adecuadas y con connotaciones xenófobas. En este mundo de la globalización, algunos pedimos el derecho de voto de los inmigrantes y que éstos puedan decidir la orientación política de un Ayuntamiento, y a usted, señor Redondo, no le agrada en absoluto que una persona de una localidad próxima pueda ser la correa de transmisión al Consistorio de un sector de la población de Orio. La persona que sustituirá al concejal de EB Oier Sarobe ha sido propuesta por los y las vecinas de Orio que impulsaron la candidatura Ezker Batua-Berdeak y Aralar con la determinación de trabajar juntos y transmitir sus preocupaciones al Consistorio, denunciar las tropelías urbanísticas cometidas y poner freno a las aberraciones futuras.
Jon Redondo lo que debería hacer es dejar la demagogia, cuando dice que las personas que han tenido que cesar en la lista -que es muy distinto a dimitir-, no querían trabajar para Orio, o que los oriotarras no se merecen esta situación.
Termina su carta diciendo "que los oriotarras no se merecen esto". La ciudadanía que me ha propuesto para la concejalía no lo ve así. Estas personas que se merecen todo el respeto, si de algo están convencidos es de que no son merecedores de las tropelías urbanísticas que se han cometido: construir en primera fila de la playa, perdiendo para siempre un espacio privilegiado de los oriotarras; destruir zonas marismeñas, no respetar los márgenes de costas y ríos, carecer de un estudio riguroso hidrológico de las avenidas de aguas de 10-50 y 100 años que garanticen la no inundabilidad de zonas de Orio, ignorar 1.500 firmas en contra de un plan urbanístico. De estas y de más cosas no son merecedores los oriotarras.
Como conclusión, decir que su carta no aporta nada y sí oculta mucho. Si quiere de verdad participación ciudadana, abra las puertas del Ayuntamiento sin limitaciones para que los concejales puedan recibir y atender a la ciudadanía, sus quejas y sus aportaciones. Ponga los medios para que los presupuestos de 2008 sean participativos, para que los oriotarras puedan decidir a dónde y a qué se destinan sus impuestos. Póngase las pilas para los cambios que se aproximan y cambiarán Orio: la conexión con la autopista, más aparcamientos, calles más acogedoras, más y mejor pequeño comercio, más y mejor servicio hostelero, que el dinero que genera el pequeño comercio circule en Orio y no se evada, que no se destruyan muchos puestos de trabajo de calidad a cambio de pocos mal remunerados, precarios y de baja calidad y diga no a Eroski. Este debe ser su reto y nuestra responsabilidad es ayudarle a llevarlo a cabo.
Iñaki García Arambarri
Concejal de Ezker Batua-Berdeak de Orio
publicado en Noticias de Gipuzkoa. Cartas al director. 24/11/07
No hay comentarios:
Publicar un comentario